Manejar correctamente los recursos y el dinero ha sido un gran motivo de preocupación para el hombre desde el inicio de los tiempos. Producto de esto, existen hoy en día carreras universitarias y profesiones que se ocupan de este fin.
Sin importar cuáles sean nuestros intereses, saber cómo manejar correctamente nuestras finanzas nos garantiza un mayor cumplimiento de nuestras metas y aspiraciones.
Muchas personas se preguntan, generalmente cuando llegan a final de mes sin un céntimo, si existen algunos secretos con respecto al buen uso del dinero. La verdad es que así como existen hábitos que nos conducen al éxito, ciertas conductas nos ayudan a ahorrar y aprovechar mejor nuestros ingresos si las aplicamos todos los días.
Reconoce lo básico
Determina que es aquello que de verdad necesitas para vivir y trata de llevar tu rutina consumiendo tan solo lo necesario. No se trata de vivir en austeridad sino más bien de evitar excesos innecesarios en tus comidas, productos de higiene, material de trabajo, etc.
Establece un esquema de pensamiento racional
Cuando obtengas ingresos, cubre primero tus necesidades y deudas (pensando de nuevo en vivir con tan solo lo necesario), después ahorra y por último distribuye una parte en otros placeres que te traigan felicidad.
Este es el orden lógico de acciones a realizar cucada vez que nos entra dinero, el problema está en que muchas veces invertimos el orden de lo que se debería hacer de primero y de último.
Hasta lo más mínimo cuenta
La mayor parte del tiempo, nos quejamos diciendo que no tenemos dinero y somos “pobres”. Lo que sucede es que no nos damos cuenta de dinero extra que nos queda cada día producto del cambio que obtenemos al comprar nuestros boletos en el tren, el café o el periódico.
Darnos cuenta de estas pequeñas cantidades nos hace ver que en realidad sí tenemos dinero (aunque sea muy poco) que puede convertirse en una gran riqueza si lo ahorramos con constancia.
Todo en orden
Trata de mantener un orden mental de tus gastos recordando todas las compras que realices. Un buen ejercicio es hacer una lista al final del día enumerando todo aquello en lo que gastaste dinero. Te ayudará a ver dónde están las fugas importantes de tus ingresos.
Añadido a todo lo anterior, un último secreto que garantiza el buen manejo de las finanzas es la buena actitud con la cual se deben afrontar las vicisitudes del día a día. Nunca debemos agobiarnos ni caer en la desesperación.
Respirando, analizando y obrando con cabeza fría a la hora de gastar, podremos mantener un buen balance en nuestras cuentas que nos permita accionar para alcanzar todas nuestras metas y sueños.