Desde hace varios años, la gente se ha ido adaptando a una transformación digital, donde las herramientas tecnológicas se convirtieron en canales principales a través de los cuales los usuarios pueden hacer de manera fácil y eficaz múltiples transacciones.
Para realizar operaciones como pagar servicios o solicitar créditos, por ejemplo, ya no es necesario acercarse a puntos de atención u oficinas, sino que a través de diferentes aplicaciones se pueden organizar todas nuestras finanzas y hacer pagos o compras.
Según cifras de la banca de oportunidades, en junio de 2020, 31 millones de adultos en Colombia tenían al menos un producto financiero formal, lo que representa un incremento de cerca de 1.6 millones en el último semestre.
Por esta razón, se debe profundizar en educación financiera virtual, para que todos los usuarios que usan las herramientas tecnológicas, puedan tener experiencias satisfactorias en la forma en la que se relacionan con los servicios digitales, pero sobre todo, garantizar que las operaciones que se hagan sean seguras y eficientes.
Memorizar claves y usuarios
Por medio de aplicaciones, se ha logrado reemplazar las formas tradicionales como el papeleo, las firmas, huella o acercarse a una oficina para hacer transacciones. Sin embargo, al hacer estas nuevas transacciones 100% digitales, los usuarios también tenemos una responsabilidad. Es importante crear un usuario y una contraseña que sean fáciles de recordar, pero que a su vez tengan cierta complejidad para descifrar. Por esta razón, expertos de AlphaCredit recomiendan evitar información personal, tales como: nombres propios, número de identificación, o fechas especiales.
Utilizar redes seguras
Los expertos recomiendan no acceder desde redes inalámbricas públicas o sitios de internet de uso común como un café internet y siempre cerrar la sesión cuando se haya terminado de usar alguna computadora, incluso aun estando en una red propia. Es recomendable navegar en el modo incógnito para no dejar rastro en el historial de navegación.
No guardar contraseñas en navegadores y aplicaciones financieras
La tecnología ha representado una mejoría de procesos para ahorrar tiempo y distancias. La multiplicidad de plataformas y la necesidad de contar con una contraseña distinta para cada una se convierte en algo muy fácil de olvidar. Entre esas ayudas está la de guardar contraseñas en los navegadores. No obstante, los expertos advierten que los usuarios a veces desconocen el manejo del almacenamiento de claves y contraseñas; por tal razón se vuelven blanco fácil de los ciberdelincuentes. Por lo tanto, recomiendan sí o sí, memorizar sus claves para transacciones financieras. Otra solución puede ser guardar estas contraseñas en aplicaciones o programas que permiten blindar el acceso con un password como, por ejemplo, en hojas de cálculo o un editor de texto configurando la opción que exige introducir una contraseña para acceder a la información. Siempre es más fácil recordar una clave que muchas.
Sitio web correcto
A pesar de la apuesta en inteligencia artificial para mejorar los servicios, es muy usual que los ciberdelincuentes utilicen páginas fraudulentas muy similares a las reales. Por esta razón, es recomendable verificar el nombre de la barra de direcciones para comprobar si es fiable la página o no. De igual forma, Aunque todo sea digital, es necesario crear un respaldo que garantice y pruebe la transacción realizada por medio de capturas de pantalla u otro registro visual de la transacción.
Autenticación de identidad
Actualmente, a la hora de solicitar algunos servicios financieros digitales es necesario realizar una autenticación de identidad. Esto, para el usuario es una forma de garantizar que el servicio que está solicitando es seguro y evita el papeleo que antes se necesitaba. Para expertos de AlphaCredit, esta es una forma en la que las personas puedan acceder a un crédito de forma rápida y segura en cualquier lugar.