Ser un líder depende del tiempo que se invierte en los integrantes del equipo, consiste en ser un guía y tener responsabilidades al ser la voz y dirección confiable y capacitada del equipo.
Un líder debe tener valores, y comprender la importancia tanto del profesionalismo, como del factor humano, debe ser proactivo y generar un ambiente de crecimiento mutuo.
El liderazgo requiere de habilidades que algunos tienen por naturaleza, y que otros deben adquirir conforme aprenden a dirigir, para identificar si cumples con ellas, a continuación puedes leer las siguientes características que todo líder debe evitar y determinar qué estás haciendo bien y en qué aspectos puedes mejorar.
Incumplir promesas
Prometer ascensos y éxitos a futuro que no llegan nunca, el motivo de estas afirmaciones sin argumentos es manipular mediante la ilusión de una mejor vida, a sus colaboradores, para hacer que estos laboren mejor y con “motivación”. Sin embargo el efecto puede ser contrario.
Evitar la cooperación
Tus colaboradores esperan una retroalimentación constante, es por esto que es de vital importancia hacer seguimientos constantes a las labores del equipo, apoyar las funciones y los roles de cada uno, aplaudiendo logros, y corrigiendo errores.
Evitar la confrontación
Un líder debe estar al tanto de todo lo que acontece dentro de su empresa, debe ser proactivo, y capaz de enfrentar situaciones incomodas, no debe evitar las conversaciones difíciles, pues el equipo confía en quien está al cargo de resolver conflictos, para esto se debe tener la capacidad de mediar a través del diálogo.
No hacerse responsable
Los malos líderes se justifican y culpan a los demás cuando fracasan, los buenos líderes asumen su responsabilidad, se autoevalúan y generan estrategias para mejorar.
Los grandes líderes aceptan su responsabilidad mediante sus palabras, y luego lo asumen mediante sus acciones de mejora conjunta.