Todos, en algún momento de la vida, hemos tenido que enfrentar períodos de crisis. Flaquear o sentir deseos de tirar la toalla, suele ser un sentimiento común durante esta etapa. Sentirnos exhaustos y con ganas de explotar es normal para todos, pues ¡somos humanos!
Cualquiera que sea la circunstancia que atravieses, sea en lo personal, laboral o de negocios, la perseverancia es lo que marcará la diferencia entre las personas que triunfan y quienes fracasan.
¿Claves para superarlo?
Obviamente, cuando no contamos con tanta experiencia en períodos de crisis, atender el conflicto de la mejor manera, no suele ser fácil.
Por ello, te ofrecemos algunas claves o herramientas que te ayudarán a superar la crisis y a sacar provecho de las oportunidades que trae consigo:
Pequeños cambios
Haz pequeños cambios, deja de lado lo que te genera presión o estrés. Intenta con cosas sencillas, como ordenar tu escritorio, pintar tu cuarto, cambiar cortinas, cocinar lo que más te guste, etc. Identifica lo que te hace sentir bien, por simple que parezca y ocúpate en ello.
Rodéate de gente positiva
Lo que menos necesitas en este momento es estar junto a personas negativas o tóxicas, que pasan todo el día quejándote. Por el contrario, rodéate de gente positiva, buena vibra, que te haga sentir mucho mejor.
Cambia de aires
Cuando algo nos agobia, lo más recomendado es alejarse del problema. Tómate un par de horas para salir de casa o la oficina, dependiendo del tema que te afecte, y cambia de aire. ¡Te ayudará a despejar la mente!
No lo tomes personal
Cuando las cosas no nos van bien, lo común es que nos obsesionemos con eso que no salió tan bien. Nos martirizamos recordándonos en lo que no somos buenos y personalizamos toda situación. ¡Basta!
Para salir adelante, debes dejar de tomar las cosas en forma personal y entender que la ocasión no depende de nosotros.
Practica la meditación
Una de las mejores formas de concentrarnos es a través de la meditación. Esta técnica no sólo nos ayuda a despejar la mente, sino además a tranquilizarnos. Deja que tu cuerpo, respiración y pensamientos se armonicen, desconectándote de todo.
Ejercítate
La mejor forma de soltar el enojo o tristeza es a través del ejercicio, liberando endorfinas. Aunque pienses que “no tienes ganas o tiempo”, anímate y practica un ejercicio, el que prefieras.
Busca la raíz
El consejo final es “busca la raíz” de todo aquello que te afecte o lo que te haga sentir desdichado.
Durante esta etapa, resulta ideal acompañarse de mentores o personas con experiencia que nos aconsejen para seguir adelante. ¡Si aún no lo conoces, identifícalo! ¡Vence tus temores y supera este episodio, pues sólo se trata de un tramo del camino!