Es de muchos entendido que las situaciones en la vida no se deben mezclar, se debe de tener la madurez suficiente para que un ámbito o circulo social en la vida no se mezcle con otro. Este concepto lo tienen claro muchas personas, sin embargo, la realidad es que en ciertas ocasiones las situaciones se entremezclan y pueden producir algo bueno, o algo muy malo.
Hablamos de las relaciones amorosas a la hora de emprender y no es precisamente emprender con tu pareja, NO. Partamos del hecho de que emprender es algo un poco complicado al principio, no porque tenga muchas gabelas o procesos difíciles. En realidad se complica porque sabemos que no al primer intento se ganará, es por eso que se debe de tener una tolerancia a la frustración muy alta y adicional seguir con el ánimo, energía y positivismo de siempre.
Teniendo lo anterior claro, entendemos que poder contar una pareja sólida, que brinde apoyo y que sobretodo sea nuestro perfecto complemento en los negocios es algo fundamental de cualquier emprendedor. Más que una simple pareja debería ser el pilar y apoyo necesario para poder seguir adelante.
Es en este punto donde en definitiva debes parar, razonar y posiblemente tomar decisiones. Piensa en todo, no solo en tu modelo de negocio, no sólo en las ventas o el dinero que necesitas para poder emprender. Piensa en cómo debe de ser esa persona que te acompañe, te motive y te impulse a seguir adelante, tu compañera o compañero de viaje.