El término startup se utiliza para hablar de aquellas nuevas empresas o emergentes asociadas a la innovación y que giran alrededor de las vanguardias tecnológicas.
Las ideas y emprendedores surgen diariamente, la innovación se ha tomado el mundo actual, y gracias a esto redes de liderazgo se han forjado globalmente, y se han creado tejidos de emprendimiento, que han permitido que cada una de aquellas creativas ideas, tengan éxito.
Es una etapa optimista, concuerdan diversos emprendedores, y es una muestra de trabajo duro y disciplinado, que se ha mantenido en el mercado, a pesar del escaso capital, la burocracia y la corrupción. En el mundo existe un grupo de emprendedores imparables, quienes constantemente buscan generar soluciones innovadoras, a las necesidades de la sociedad.
Por sus características diferenciadoras, y positivas, presentan altos índices de crecimiento y necesidades de capital, apoyándose de agentes como incubadoras o aceleradoras, bussines angels o las plataformas de crowdfunding y fondos privados que apuestan por estas ideas potenciales de negocios.
Las startups latinoamericanas han tenido un crecimiento arrollador que no se detiene, llamando la atención de grandes inversionistas, y desarrolladores de políticas públicas, de acuerdo con un informe de investigación publicado por la OCDE.
Países como Brasil, México, Colombia, Perú, Argentina han creado dinámicas del ecosistema emprendedor, voluntaria e involuntariamente, acordes a los desarrollos de cada país.
Es por esta razón que es común identificar nuevos espacios de colaboración y vías de financiación que ayudan al desarrollo de las empresas emprendedoras.
Sin embargo, es recomendable que las políticas para la creación y permanencia a futuro de estas sean pensadas y diseñadas de un modo más coordinado, con el fin de obtener alianzas entre startups, con el sector privado, centros educativos y canales de tecnología en el mundo.
De acuerdo con la OCDE este tipo de acciones generaría mejora en los procesos de aprendizaje y en la economía de estás.
También es importante destacar, el valor de conocer las herramientas de información, y conocerse como si se tratara de una red interconectada entre las mismas empresas emergentes, es decir, realizar una investigación o un portal que permita esclarecer datos esenciales, como, por ejemplo, la cantidad de startups en Colombia, Latinoamerica y el mundo, en qué área se desempeña, y como podrían trabajar en equipo, es decir crear una vía de comunicación.
Hasta ahora uno de los pocos portales que alojan información acerca de estas, es AngelList, una base de datos que recolecta la información de estas ideas innovadoras, para quienes desean conocerlas, formar parte, e invertir en ellas.
De acuerdo con esta lista, en América Latina hay alrededor de 7.230 startups que aportan a mejorar las principales economías, de países como Colombia.
Debilidades paradójicas
Por supuesto encabezando la lista, está la escases de recursos, de esto depende que cientos de proyectos que recién inician puedan sobrevivir y hacer crecer sus empresas.
Sin embargo, se plantea que la inseguridad por parte de quienes conceden dichos prestamos ha disminuido, y que a su vez los inversores se involucrarán cada vez más con este movimiento, a medida que surjan mayores casos de éxito, como es de esperarse.
Otro limitante es la falta de innovación en América Latina, pues para que los proyectos emergentes, puedan crecer, se requiere de un ambiente apto que sea un mediador de este proceso, elementos como la producción, las bases científicas y la tecnología deben crecer y fomentar la proyección a futuro de estas.
Por otro lado, se encuentra la incertidumbre por las debilidades estructurales económicas de la región, las cuales generan brechas de productividad.
Fortalezas Ganadoras
Las startups pueden generar respuestas positivas en cada uno de los ecosistemas en los que se desarrollan, generando ambientes aptos para su propio crecimiento, convirtiéndose en incluso canalizadores de recursos públicos y privados, generando oportunidades para nuevos emprendedores, y para la expansión de proyectos con trayectoria.
El mágico papel de las Incubadoras en el mundo de las startups
Pasión, determinación, visión, perseverancia y flexibilidad, son las características de Incubadoras, que tienen como misión impulsar la innovación en el entorno empresarial, estás no se dejan contaminar por los modelos tradicionales de negocios, tal es el caso de Espacio Medellín, quién por medio de su estrategia de negocio se ha posicionado como un modelo innovador y gestor de empresas de emprendimiento.
Su función central es crear innovación interna en la organización, es decir ideas que se crean o impulsan dentro de una compañía principal, la cual brinda recursos propios para desarrollos de nuevas ideas creativas rentables.
La incubadora aporta los recursos financieros, logísticos y de negocio con el fin de que la propuesta emprendedora crezca en el mercado, se consolide, y obtenga la estabilidad suficiente.
En la mayoría de los casos cuando la startup es lo suficientemente madura, se convierte en una empresa independiente un fenómeno conocido como ‘spin-out’.
Existe también un modelo de incubación en la que la empresa líder se autofinancia con los beneficios obtenidos de las startups incubadas.
Es así como este modelo se ha convertido en el apoyo de empresarios, que se han dado la mano para crecer juntos en proyectos colaborativos, logrando convertir sus sueños efímeros en una realidad certera.