Durante siglos el contenido de la biblia ha sido utilizado como instrumento no solo religioso, sino como una forma de aplicar lecciones, experiencias, historias y principios básicos universales vigentes y completamente válidos para cualquier persona sin importar su inclinación religiosa.
Dejando a un lado el dogmatismo y la subjetividad que pueden surgir a partir de los textos bíblicos, lo cierto es que su contenido tiene métodos completamente válidos para su aplicación en las finanzas personales y la vida diaria de todos.
Pero cómo poder darle una interpretación objetiva y extraer información que realmente valide la importancia de conocer sobre el orden y el control que debemos tener en nuestras finanzas y la mejor manera de manejar un préstamo y salir con éxito de una deuda.
En este aspecto en particular, y como en cada caso, existen pasajes específicos dentro de la biblia que hacen referencia al manejo de las finanzas, los préstamos y las deudas; y de como un pequeño error puede llevarnos a tener una muy mala experiencia.
Descifrando los Mensajes
El mundo financiero es muy complejo, a nivel personal las finanzas y específicamente las deudas, son situaciones que si no sabes cómo manejarlas se saldrán de control y serán un gran peso en tu vida que te dejará completamente desmoralizado y que afectará tus relaciones personales y genera conflicto en tu núcleo familiar.
Es así como buscar apoyo de cualquier tipo, incluso bíblico es una buena manera de sanar conflictos y tener diferentes perspectivas del tema, por ejemplo en Filipenses 4:19 se hace referencia a que es preciso mantener la calma en situaciones difíciles, si no tienes la manera de pagar tus deudas, debes tener fe y trabajar en función de hallar soluciones.
En Salmo 37:21 Se aborda el tema de las deudas de un modo más crudo; así como existen personas bondadosas y dispuestas a honrar sus deudas, también hay inescrupulosos que no se preocupan en saldar sus deudas y no les importa todo el daño que pueden hacer sus acciones.
Finalmente, Proverbios 22:7 hace referencia al círculo vicioso que puede surgir de una deuda; esto es esclavizarse ante un prestamista para depositar todos tus esfuerzos en pagar tus deudas e intereses.
Evidentemente la interpretación de la biblia puede resultar ser algo muy personal, sin embargo leer sus enseñanzas quizás puede ser una buena forma de advertir los riesgos que implica involucrarse en un tema tan delicado como lo es la deuda.